#Terminado Warhammer 40K: Space Marine 2

A continuación les comparto una breve reseña sin spoilers de este título y algunas capturas propias de los primeros minutos de juego.

Análisis técnico:

- Gráficos (85/100):

Desarrollado por Saber, la secuela de Space Marine utiliza el motor gráfico Swarm, motor que vimos por última vez en World War Z. En este caso, se lo exprime más allá de los límites conocidos porque no solo maneja una enorme cantidad de enemigos en pantalla sino que también el modelado de las texturas es sólido. Cómo si fuera poco, los filtros hacen del plano largo una maravilla visual que destaca en cada frame. Cada plano de guerra es bestial en todo sentido, incluso teniendo un sobrio modo foto. Todo esto no sería digno de admirar si tuviese problemas de optimización, los cuáles suelen ser pocos o nulos, dependiendo de la plataforma y la configuración que se utilice. Pero en general, su funcionamiento es óptimo. Sobretodo teniendo en cuenta los detalles anteriormente nombrados.

En el plano corto, los detalles también se hacen notar. Tanto en las armaduras de los Space Marines como en sus armas. Y no solo en ellos, también en aliados y enemigos, que tienen una variedad no muy amplia pero si bastante justa. Lo mismo que sucede con los mapeados o los efectos, no es una variedad abismal pero si una cantidad justa, acorde a la duración del juego y con un gran trabajo de fondo. Sin embargo, el punto flaco son algunas animaciones de transición (que son 4 en total), las cuáles se repiten en algunos momentos del juego y lo hace sentir un poco... como el anterior, como si estuviésemos de nuevo en 2011. Lo cuál no cuadra en absoluto con el resto del apartado.

- Historia/Diseño de nivel (80/100):

La historia ocurre un tiempo después del primero. Si bien mucho de advirtió sobre la posibilidad de jugar este título sin haber jugado en anterior... la verdad es que no es tan así. La historia se entiende por si sola pero no se va a aprovechar al máximo sin haber jugado, al menos el primer Space Marine, ya que la cantidad de referencias y datos relacionados con la precuela, son muchos. Luego ya, si el jugador tiene una noción del universo Warhammer 40K, su lore y detalles, cuanto más sepa, mejor. Sobretodo porque, si bien no hay texto de relleno como suele haber en muchos títulos, hay unas notas de voz y algunos diálogos que son más dedicados a los fanáticos de este universo. Ahora, en cuanto a lo que es el desarrollo de la campaña (de una duración de 8-10hs promedio), es sobretodo buen ritmo. Luego, el desarrollo de personajes, que al principio parece bastante vago pero horas más tarde se va completando poco a poco. En este caso donde faltó mayor profundidad es en los enemigos principales y sus objetivos, ya que no se introducen hasta después de un par de horas de juego. Lo que hace que el jugador inexperto que llega a este título sin saber mucho de Warhammer 40K, se sienta un poco perdido, sin saber qué o por qué está haciendo lo que hace.

En cuanto al diseño de nivel, sigue la misma estructura Gears del primero pero mejora enormemente la introducción de cada mapa en el mundo. Esto también gracias al motor, que permite ver cientos de enemigos venir desde kilómetros de distancia hasta el escenario de combate. Lo cuál lo hace mucho más inmersivo. Incluso en momentos donde los objetivos pueden sentirse un poco sosos o repetitivos, como aguantar una oleada de enemigos. Mismo en el último cuarto de juego donde tampoco trae muchas ideas nuevas.

También la interacción con los escenarios y el manejar bien el scope son parte del buen diseño. Sin abrir de más el mundo, con mapas gigantes y vacíos que no aportan nada. Space Marine 2 no negocia el ritmo de juego por nada del mundo.

- Jugabilidad (80/100):

Si bien es cuestionable la implementación de un sistema de parry (porque está de moda en estos tiempos) su mayor problema no pasa por el sistema mismo, si no por el hecho de cómo funcionan los scripts. Está bien que el juego te permita cortar animaciones, es lo que se debe hacer para mejorar la fluidez en combate y permitirle al jugador operar con herramientas a su favor en pos de mejorar el combate mismo. Sin embargo, que los enemigos comunes, hasta los más pequeños, corten, por ejemplo, un golpe cargado de un Space Marine con un mínimo toque, va en contra de esa fluidez. Si el combate fuese 1vs1, estilo Souls, se entiende que el jugador deba manejar mejor el timing del combate. Pero en medio de decenas de enemigos, incluso con la furia activada (mecánica que estaba de moda allá por 2011 por juegos como God of War y que se dejó en este título solo por respetar la idea), es contraproducente. El "poise" del Space Marine debería ser mayor, como lo era incluso en el primero. Solo que acá se lo entregó a cambio de un sistema de parry y de cortar animaciones. Con lo que te queda un híbrido, entre un Hack&Slash más tipo Diablo, con muchos enemigos y a su vez, un sistema de parrys con ejecuciones al estilo Doom (que ya las tenía el primero pero que acá mejoraron y aprendieron de los nuevos Doom). Junto con estos sistemas, también entra en conflicto el hecho de que un bicho te salte desde la otra punta del mapa y no veas en qué momento tocar el botón de parry o no puedas, por la cantidad de enemigos. Entonces no se llega a utilizar de la mejor manera, termina recurriendo a un sistema de pixel perfect incluso cuando el ataque viene desde fuera del campo de visión del jugador. Donde tiene que estar cortando animaciones porque le aparece una flecha hacia una dirección desde donde viene un ataque para esquivar o contraatacar.

Eso en cuanto al sistema de combate melee. En cuanto al sistema de combate a distancia, con armas y otros elementos, es todo lo que quiso ser Gears en sus últimas entregas y no pudo. Si bien no tiene un sistema de coberturas, lo que es la balística, la cantidad de armas y sus usos, el feedback en el gunplay, todo está muy bien trabajado para que Space Marine 2 sea una mejora sustancial de lo que ya había mostrado en su anterior entrega.

Además de la campaña que puede jugarse en solitario o en cooperativo hasta 3 jugadores, tenemos el modo operaciones. Un modo de misiones aisladas con varias clases distintas de juego, donde tendremos diversos objetivos e iremos mejorando nuestro equipamiento con la experiencia que consigamos (misiones que además, complementan en menor medida algunos detalles de la campaña). También podemos mejorarlo con una serie de retos que tenemos en el juego. Por otro lado está la opción PvP, por si queremos enfrentarnos a otros jugadores, muy similar al sistema de los últimos Gears. Además, hay que recalcar que si queremos jugar el modo campaña u operaciones en solitario, los bots no serán como un jugador humano pero son útiles. No son bots de relleno sino que eliminan unidades enemigas, reviven aliados o incluso al jugador, algo que también se valora en juegos cooperativos, que al momento de la baja no cargue el checkpoint sino que te puedan revivir los bots como si fuese un aliado humano. También realizan ejecuciones si el jugador no las hace y no menos importante, los diálogos aportan mucho al desarrollo de cada nivel.

- Sonido (85/100):

Desde el vamos, la banda sonora hace su trabajo. Pero en los momentos donde mayor epicidad tiene que demostrar, la banda sonora dice presente y se vuelve protagonista. Las voces originales también están muy bien logradas. No solo en el lipsync sino en la narración misma. Pero quienes se llevan todos los galardones son los efectos de sonido. Mucho más Doom y mucho menos como un shooter genérico en tercera persona. Como pasaba con su antecesor, por ejemplo. En este caso la balística y las explosiones están a la altura de las circunstancias. Con solo escuchar el heavy bolter rugir, se sabe que hay un gran trabajo de fondo.

Nota final: 83/100

Un shooter brutal del universo Warhammer. Una buena secuela que mejora en todo y que no pierde el rumbo ni el ritmo. Con un rico lore de fondo, una jugabilidad que aprende de juegos como Doom o Gears y un acompañamiento audiovisual destacable.